Plantas que generan energía positiva en tu hogar.
4 febrero, 2021

Las plantas avisan cuando necesitan agua, tierra, más espacio…solo tienes que observarlas.

Cuando las plantas de interior llevan 2 años o más en un mismo macetero, conviene revisar si es del tamaño adecuado o necesita ser trasplantada. En el momento en que las cambies a una maceta mayor o les renueves parcialmente el sustrato las ayudarás a sentirse muchísimo mejor y te lo demostrarán luciendo su verde más brillante y brotando ante tus ojos.

Generalmente, lo ideal es hacerlo antes de que la planta empiece su floración o su época de crecimiento, es decir, a finales del invierno o principios de la primavera. Es importante no trasplantar las plantas en su época de floración, a menos que sea nueva y la maceta sea muy pequeña.

Si te encuentras en la situación en la que necesitas trasplantar una planta y no sabes si es el momento adecuado o debes esperar más, aquí te contaremos como hacerlo. Explicaremos el cuándo, dependiendo del clima, del tipo de planta que es; trasplantaremos en un momento u otro. También hablaremos sobre los cuidados necesarios tras el trasplante para que la planta se recupere.

Las plantas no están adaptadas al trasplante, ya que en su hábitat natural no hay nadie que las saque de la tierra y las ponga en otro lugar. Por ese motivo es importante observarla para saber cuándo disminuye su actividad, cuándo su ritmo de crecimiento disminuye, ya que será el momento adecuado para trasplantarla. Existen algunas excepciones, pero por lo general tendremos que seguir el calendario que llevan inscrito en sus genes para saber el momento adecuado.

Plantas de huerto: Las plantas de huerto sembradas en semillero se deberán pasar a macetas más grandes o directamente a la tierra en cuanto tengan un mínimo de un par de hojas verdaderas. Si estamos en otoño, en un clima con inviernos fríos, no se deben trasplantar hasta que llegue la primavera, a no ser que se disponga de un invernadero con calefacción.

Plantas vivaces/anuales/bianuales: Con este tipo de plantas seguiremos el mismo consejo que con las plantas de huerto, trasplanta cuando tengan un par de hojas verdaderas, poniéndolas a pleno sol o a semisombra (dependiendo de la especie que sea).

Árboles caducifolios y perennes: Los árboles se deben trasplantar a finales de invierno, antes de que la primavera se asiente y empiecen a crecer. Los árboles de hoja caduca se puede trasplantar en otoño cuando ya han perdido todas las hojas.

Arbustos: Los arbustos deben trasplantarse antes de de la primavera.

Cactus y suculentas: Se deben trasplantar en primavera y en verano, teniendo mucho cuidado en sacar el cepellón entero sin que se desmorone.

Plantas carnívoras: En las plantas carnívoras se recomienda realizar el trasplante en primavera antes de que despierten de la hibernación, pero también se puede hacer en verano.

Palmeras: La época ideal para trasplantarlas es en primavera.

¿Cómo trasplantar una planta?

Cambiar de macetas a las plantas parece un acto sencillo, pero no lo es tanto. Tenemos que recordar lo comentado anteriormente, que el hecho de trasplantar una planta es totalmente antinatural para ella.

AL cambiarla de recipiente se la obliga a gastar una energía que en su hábitat natural o si estuviera plantada en el jardín, no tendría necesidad de hacer. Por lo tanto, el trasplante supone un cambio que si no se realiza bien, puede llegar a debilitarla mucho, hasta tal punto que podría echarse a perder para siempre sin remedio. Para que eso no ocurra te explicamos como hacerlo paso a paso.

Escoger la maceta.

Es probablemente una de las cosas más importantes a la que debemos prestar atención a la hora de saber como trasplantar una planta. Una maceta demasiado estrecha no nos servirá, pero una que sea demasiado ancha tampoco ya que la planta podria sufrir por exceso de riego. ¿Cómo sabremos cuál elegir? Fijandonos en la propia planta y en su desarrollo.

Para haceros una idea:

  • Plantas que van a ser de tamaño grande (palmeras, árboles, bambúes, etc) necesitaran un recipiente que sea al menos 4 cm más ancho y profundo que el anterior.
  • Bulbosas, herbáceas y similares pueden plantarse sin ningún inconveniente en macetas bastante más anchas que profundas.
  • Cactus, crasas y similares dependerá del tipo de especie, por lo general suelen necesitar un tiesto que sea unos 2 ó 3cm más ancho que el anterior.
  • Los bonsáis han de plantarse en bandejas destinadas para ellos, lo suficientemente anchos para que su sistema radicular pueda caber bien.

¿De plástico o de barro?

Como son de materiales muy diferentes veremos cuales son las ventajas y desventajas de cada tipo.

Macetas de plástico.

Ventajas: Son muy económicas, ligeras y por lo tanto de fácil transporte o cambio de lugar.

Desventajas: Con el paso del tiempo los rayos del sol hacen que se debilite el material y se rompen con facilidad. Si vivimos en una zona muy calurosa, el plástico se sobrecalienta, lo que supone un peligro para las raíces. También se debe tener en cuenta que el plástico no es poroso por lo que su sistema radicular puede tener problemas para enraizar bien.

Macetas de barro.

Ventajas: Permite que las raíces que se desarrollen correctamente y son muy resistentes. También existen muchos tipos de barro ornamentales y además tienen el peso adecuado para soportar mejor el viento que las macetas de plástico.

Desventajas: Su precio es mayor y se rompen con más facilidad al caer al suelo.

Prepara el sustrato.

Una vez elegida la maceta, tenemos que preparar el sustrato. Como existen muchos tipos de plantas cada una de ellas con sus propias necesidades, es mejor asesorarte en tu Garden para saber que tipo de mezcla debes utilizar para tu planta. Con el sustrato adecuado para nuestra planta, rellenaremos con el la maceta un poco más de la mitad.

Extracción de la planta.

Esta parte es una la más delicada, sacar la planta de su antigua maceta. Hay que ir con sumo cuidado para que el cepellón no se desmorone, ya que si esto sucede la planta tendrá más dificultades para superar favorablemente el trasplante.

Para facilitar la extracción y evitar problemas, regaremos a conciencia empapando bien todo el sustrato. Acto seguido daremos unos golpes a la maceta para que la tierra se despegue de ella, cogeremos la planta por el tallo principal o base del tronco y tiraremos de ella hacia arriba. Si vemos que no sale con facilidad o si tiene las raíces por fuera de la maceta, lo que haremos será cortar el recipiente con unas tijeras.

Ya casi tenemos el trabajo terminado, ahora lo que queda por hacer es acomodar la planta en su nueva maceta y rellenar con más sustrato. A medida que vamos rellenando iremos ejerciendo un poco de presión sobre el sustrato para compactarlo.

Para finalizar, regaremos bien nuestra planta y la colocaremos en una zona luminosa pero protegida del sol directo. Aunque sea una planta heliófila, al estar recién trasplantada es aconsejable colocarla en un lugar donde tenga semisombra hasta que veamos que empieza a crecer. Pasado un mes del trasplante ya podremos abonarla.

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